VIOLENCIA EN LA ESCUELA

Un grave problema que se ha presentado en las escuelas es la violencia, que va desde la agersión verbal hasta la agresión física. Los maestros y padres de familia tienen que estar al pendiente de los pequeños o jóvenes para detectar dicho problema.

Según Manuel Castro (Castro, 2005), existen tres tipos de factores que intervienen en la violencia escolar.
  1. Factores personales: La agresividad se produce por el déficit o dificultades en la adquisición de habilidades cognitivas, emocionales y sociales
  2. Impulsividad: Falta de control en el impulso que lleva actuar en cosas sin pensar.
  3. Empatía: Respuesta en la que se reconoce el estado emocional de la otra persona, llega a sentir un estado emocional similar. A mayor empatía menor agresividad.
  4. Factores relativos al género y edad: Los niños presentan mayor agresividad que en las niñas; los pequeños agreden más de forma física, mientras que los mayores agreden más de forma verbal o indirecta.
  5. Factores familiares: Los factores que tienen influencia directa en el desarrollo de patrones de conducta agresiva son:  actitudes emocionales negativas de los padres durante los primeros años de vida, la permisividad y la tolerancia hacia las conductas agresivas de los hijos, sin establecer límites claros, la disciplina autoritaria como el castigo físico y las explosiones emocionales negativas, puede estimular la conducta agresiva en los hijos..Los niños que sufren malos tratos se manifiestan más agresivos en sus interacciones con los compañeros y tienen más problemas de conducta. Maltrato físico del niño, el niño puede llegar a reaccionar con agresividad y padres alcohólicos porque muestran abandono hacia sus hijos y los niños llegan a reaccionar con violencia; además de la separación de los padres: puede provocar un abandono del niño y una conducta agresiva de los padres hacia sus hijos, pues suelen descargar su malestar, creándole un sentimiento de culpabilidad.
  6. El centro escolar: El clima es crucial en el proceso de cambio de las conductas agresivas. Hay factores de tipo organizativo que favorecen el ambiente de agresividad: desorganización de espacios y horarios, masificación, espacios de clase pequeños, pocos lugares para recreo, edificios descuidados, ausencia de normas claras de convivencia, etc.
Según Freud (Moreno Oliver, 2005), consiguió demostrar que la mayoría de los problemas de conducta del niño tiene su origen inmediato en los conflictos que surgen entre éste y el ambiente en que se desarrolla.

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